José Montilla ha declarado que reeditar el tripartido sería traicionar los principios del PSC. Aunque por motivos electorales reniega de sus socios de gobierno, está claro que no ha traicionado ni va a traicionar a su partido, los traicionados son los ciudadanos y en particular sus propios votantes.
El PSC se ha plegado en Cataluña ante los postulados soberanistas de ERC e ICV.
Es curioso ver como desde hace años en Cataluña, sectores de una pretendida izquierda, dejan de lado los intereses de las clases que tradicionalmente los han votado, para seguir la senda del nacionalismo más rancio.
Podemos fijarnos también en el caso de Iniciativa, partido político que debe sus orígenes al PSUC y que ahora con líderes como Joan Herrera, defiende planteamientos secesionistas adornados de ecopopulismo.
Montilla no se desmarca del tripartito por principios, lo hace ante el descalabro electoral de su formación y la inminente victoria de CIU.
Mientras tanto el PP catalán no descarta un acuerdo con CIU, esperando ser decisivo.
Realmente ninguno de estos partidos representa una clara alternativa que devuelva la ilusión a los ciudadanos por la política.
La realidad es que en Cataluña hay más de 600.000 parados y que las familias tienen verdaderos problemas para llegar a final de mes.
Es sangrante ver como autónomos y pequeñas empresas se ven abocadas al cierre por falta de crédito.
No es de extrañar que los ciudadanos tengan una nula preocupación por la política, ya que los políticos no saben o no quieren ver cuales son sus verdaderos problemas e inquietudes.
El PSC se ha plegado en Cataluña ante los postulados soberanistas de ERC e ICV.
Es curioso ver como desde hace años en Cataluña, sectores de una pretendida izquierda, dejan de lado los intereses de las clases que tradicionalmente los han votado, para seguir la senda del nacionalismo más rancio.
Podemos fijarnos también en el caso de Iniciativa, partido político que debe sus orígenes al PSUC y que ahora con líderes como Joan Herrera, defiende planteamientos secesionistas adornados de ecopopulismo.
Montilla no se desmarca del tripartito por principios, lo hace ante el descalabro electoral de su formación y la inminente victoria de CIU.
Mientras tanto el PP catalán no descarta un acuerdo con CIU, esperando ser decisivo.
Realmente ninguno de estos partidos representa una clara alternativa que devuelva la ilusión a los ciudadanos por la política.
La realidad es que en Cataluña hay más de 600.000 parados y que las familias tienen verdaderos problemas para llegar a final de mes.
Es sangrante ver como autónomos y pequeñas empresas se ven abocadas al cierre por falta de crédito.
No es de extrañar que los ciudadanos tengan una nula preocupación por la política, ya que los políticos no saben o no quieren ver cuales son sus verdaderos problemas e inquietudes.
Javier Díaz
publicado en e-Noticíes:
http://opinion.e-noticies.es/cartas-al-director/montilla-se-desmarcav-46180.html